REFLEJOS DE UNA BÚSQUEDA ALQUÍMICA

Florilegio epistolar.

Los escasos buscadores que, al final de la vida del autor, se dejaron guiar por su profunda intuición hasta El Mensaje Reencontrado, se dirigieron a Cattiaux para adquirir un libro aún inacabado. Entablaron con él una profunda amistad e incluso participaron en la gestación de ciertos versos.

Cattiaux mantuvo con este grupo de amigos apasionados por su obra una intensa relación personal; algunos de ellos no residían en París, lo que justificará una relación epistolar continua. Si se escribían casi a diario, era para compartir su interés por los misterios contenidos en los versos del Mensaje Reencontrado. […]

Introducción al Florilegio epistolar.

Por Emmanuel d'Hooghvorst - 1980

El lector del Mensaje Reencontrado encontrará en las páginas que siguen a un Cattiaux conmovedor y cercano. La originalidad, la libertad, la violencia también, y a veces la dulzura de estas cartas, nos desvelan una personalidad poco común, un hombre interior, queremos decir, que ha madurado durante mucho tiempo en el aislamiento y la reprobación. El hombre interior, de hecho, al no ser de este mundo, causa escándalo cuando quien lo lleva se vuelve transparente. Los mediocres no iban a Cattiaux y Cattiaux no iba a ellos.

Este solitario no buscaba la soledad, pero esta le fue como impuesta por la incomprensión de su entorno. Muy pocos, de hecho, sospecharon en Cattiaux al hombre precioso, libre y vivo, aunque «extranjero», y ese extranjero filtraba severamente a sus amigos.

Es precisamente a sus amigos a quienes escribió estas cartas. Hemos clasificado por temas y sin tener en cuenta ni el orden cronológico ni los diferentes destinatarios, un cierto número de pensamientos sobre temas, a primera vista, muy diferentes. Pero en suma, su mensaje siempre es el mismo: el Arte, la Gran Obra, no pueden ser practicados sin pureza interior, sin vida mística, sin olvido de sí mismo, sin ofrenda y sin amor.

Han pasado treinta años y una nueva generación ha surgido. Sin duda será más perspicaz que la anterior. Los precursores de la talla de un Cattiaux ven lejos en el futuro. De hecho, es su destino haber sido incomprendidos y renegados en vida, pero alabados y buscados por las generaciones que les han sucedido.

LEE TAMBIÉN

Como contexto de la correspondencia.

0
cartas entre Louis Cattiaux y sus contemporáneos
ESTIMADO SR X,

Los correspondientes de Cattiaux.

  • Serge Lebbal

    1931 - 1955

  • Serge Lebbal
  • James Chauvet

    1885 – 1955

  • René Guénon

    1886 - 1951

  • Gaston Chaissac

    1910 - 1964

  • Charles d'Hooghvorst

    1924 – 2004

  • Charles d'Hooghvorst
  • Emmanuel d'Hooghvorst

    1914 - 1999

  • Emmanuel d'Hooghvorst
LA CORRESPONDENCIA DE LOUIS CATTIAUX

Extractos.

Desde el otoño de 1980 hasta el verano de 1994, se publicaron de forma ininterrumpida fragmentos de cartas de Louis Cattiaux en la revista belga «Le Fil d’Ariane», bajo el título de «Florilège cattésien» y en español, «Florilegio epistolar» en la Biblioteca «La Puerta» en 1999. Emmanuel d’Hooghvorst, encargado de la selección, escribe al respecto: «Hemos clasificado por temas y sin tener en cuenta ni el orden cronológico ni los diferentes destinatarios, un cierto número de pensamientos sobre temas aparentemente muy diferentes. Pero, en suma, su mensaje es siempre el mismo: el Arte, la Gran Obra, no puede ser practicado sin pureza interior, sin vida mística, sin olvido de uno mismo, sin ofrenda y sin amor».

En octubre de 2013, Ediciones Obelisco publica en un volumen la correspondencia completa entre Louis Cattiaux y René Guénon.

En 2018, la colección «La Puerta» dedica el número 74 de su revista a la privacidad y divulgación en la tradición hermética – Correspondencia de Louis Cattiaux con James Chauvet, Gaston Chaissac y Serge Lebbal.

Descubre

Las ediciones de la correspondencia.

Fragmentos de otra época…